José de la Paz Pérez
A finales de enero de 2020 la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró emergencia internacional por la rápida propagación de la nueva enfermedad, conocida como Coronavirus, primero, y después como Covid-19.
El pasado viernes 5 de mayo, y luego de unos 7 millones de fallecimientos en el mundo a causa de esta enfermedad, la misma organización ha declarado el fin de lo que fue considerado pandemia por su alcance de índole global.
Aunque esta noticia ha sido recibida con gran alegría por muchas personas en todo el mundo, ya que indica que los contagios están disminuyendo de manera destacada, y que se están logrando avances significativos en la lucha contra el virus, eso no significa que haya sido vencida la enfermedad, la cual persiste, aunque en números mínimos.
Desde que la OMS declaró una emergencia internacional, en enero de 2020, los gobiernos de todo el mundo han tomado medidas para controlar la propagación del virus, incluyendo el cierre de fronteras, el distanciamiento social y el uso de mascarillas. A pesar de estos esfuerzos, la pandemia ha causado la muerte de millones de personas y ha afectado a la economía mundial de manera significativa.
La decisión de la OMS de declarar el fin de la emergencia internacional, o a la pandemia, se basó en una evaluación exhaustiva de la situación actual en todo el mundo.
Según la organización, se han logrado importantes avances en la lucha contra el virus, como la creación de vacunas eficaces y seguras y el aumento de la capacidad de los sistemas de atención médica para tratar a los pacientes. Además, la OMS ha destacado que muchos países han implementado medidas efectivas para controlar la propagación del virus y han logrado reducir significativamente el número de casos y muertes relacionados con el Covid-19.
Aunque el anuncio de la OMS es una buena noticia, es importante recordar que la pandemia aún no ha terminado por completo. Todavía hay muchos países que enfrentan altas tasas de transmisión del virus y que luchan por acceder a las vacunas y otros recursos necesarios para combatirlo.
Además, existen variantes del virus que podrían ser más contagiosas o más mortales, lo que significa que todavía hay incertidumbre sobre cómo evolucionará la pandemia en el futuro.
En resumen, el anuncio de la OMS del fin de la emergencia internacional por el Covid-19 es un acontecimiento importante en la lucha contra la enfermedad.
Sin embargo, todavía hay mucho trabajo por hacer para controlar la propagación del virus y garantizar que todos los países tengan acceso a las herramientas y recursos necesarios para combatirlo. Es importante continuar tomando medidas preventivas, como el uso de mascarillas y el distanciamiento social, y apoyar los esfuerzos globales para erradicar el virus de manera efectiva y sostenible.