José de la Paz Pérez /
Chilpancingo, 26 de noviembre de 2024. Durante su intervención en tribuna, dirigida a combatir los tabúes y estigmas que rodean la menstruación, la diputada Marisol Bazán Fernández presentó un exhorto en el Congreso de Guerrero en el cual plantea a la Secretaría de Educación y a la Secretaría de Salud implementar campañas de información sobre la menstruación desde un enfoque de género y derechos humanos.
La legisladora acapulqueña subrayó que la menstruación, un proceso biológico natural, ha sido históricamente rodeada de creencias y tabúes que la asocian con impureza y contaminación.
Dijo que aún hoy se utiliza un lenguaje eufemístico como ‘me visitó Andrés’, ‘la regla’ o ‘el período’, y se oculta el manejo de productos menstruales como si fuera algo vergonzoso”, destacó Bazán Fernández.
La diputada enfatizó que estas creencias perpetúan la vergüenza y el estigma social, afectando la vida, salud y bienestar de las niñas, mujeres y personas menstruantes, además de limitar su autonomía.
En su intervención, citó cifras alarmantes de la Primera Encuesta Nacional de Gestión Menstrual 2022:
-El 69% de las mujeres carece de información adecuada sobre su primer período.
-Solo el 30% lleva un control de su ciclo menstrual.
-Aunque el 80% cuenta con infraestructura para gestionar su menstruación, el 56% no recibe productos menstruales gratuitos.
-El 65% desconoce la exención del IVA en productos menstruales.
Bazán Fernández también subrayó la necesidad de incluir a hombres y adolescentes en la educación menstrual para fomentar la empatía y eliminar los prejuicios que alimentan la violencia de género.
La información debe llegar a todas las comunidades, especialmente a los pueblos indígenas, donde las brechas de acceso a recursos e información son más marcadas, puntualizó.
La iniciativa fue turnada a las comisiones unidas de Salud y de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes para su análisis y dictamen.
De ser aprobada, marcaría un paso significativo hacia la inclusión de la educación menstrual como un componente esencial del bienestar y los derechos humanos en Guerrero.